. HISTORIAS DEL SISMO EN MÉXICO - Los Expulsados

"Tu afición es nuestra pasión".

HISTORIAS DEL SISMO EN MÉXICO

en Mas allá de la patada por
Banner

Esta vez no hay mucho que explicar, las historias hablan por sí mismas. El sismo del pasado 19 de Septiembre quedará plasmado en la memoria de todos los mexicanos para siempre. Estará marcado por toda la eternidad para su gente. Después de 72 horas de terror, México trata y quiere levantarse, el golpe ha sido duro y contundente.

Por respeto a los implicados, los nombres fueron cambiados.

Los primeros momentos

13:00 hrs del Martes 19 de Septiembre de 2017 (piso 5)

-¡Y ya te dije, quiero el divorcio! (se escucha un manotazo sobre la mesa).

¡Espera, Esther!, lo que tú estás haciendo está mal, no puedes llevarte al niño sin antes esperar el veredicto del juez.

-¡No me importa, ya estamos hartos de tu alcoholismo, y ahora no solo es eso si no que ya caíste en tu mentira Miguel!, ¡Toño y yo ya sabemos que estás saliendo con otra mujer!, y ¿sabes?, ¡no me importa!, ¡me importa un puto carajo lo que hagas con tu pinche vida pero a mi hijo no lo tocas!, ¡aunque tengas a tu bufete de licenciados carroñeros a tu disposición, yo lucharé por tener conmigo a mi hijo!

Mira hija de la chingada, no tientes al pinche diablo, no me tientes cabrona porque sabes que puedo acabarte en un dos por tres.

-¡Lo sabía Miguel Ángel!, pero ¿sabes qué?, ¡me vale madres!, ¡y quédate con tu pinche departamento, voy a recoger a Toño a la escuela y espero no verte cuando regrese!

13:07 hrs del Martes 19 de Septiembre piso 6

-¡Ay mi amor!, ¿sabes?, te amo un chingo, ¿ya saliste?, yo ya estoy en el depa, creo que bajaré al Oxxo a comprar unas cosas para hacer una gelatina, hoy viene la tía Mara, la invitó mamá, quiere platicarme algunas cosas sobre la boda, ya sabes, cosas de mujeres.

(Voz de celular vía WhatsApp) “Ok princesa, yo sigo en la oficina, si quieres nos vemos cerca de tu casa (en la Roma) para comer, ¿si fuiste al pilates?, ¿cómo está Rodo?, ¿ya le compraste sus croquetas?, no tenía, ayer se mojaron porque las dejé afuera y se agradaron todas”.

-Jajaja, eres un tonto, ahora voy a gastar por tu culpa, lo bueno que ya le quedaba poquitas. Oye flaco…

¿Qué pasa princes?, dime, porque creo que ya llego el jefe y ya sabes como se pone si estoy en el celular?

-¿Ya te dije hoy que te amo?

Mi amor… ¡qué tierna!, eres el amor de mi vida, me encanta que seas así conmigo.

-Jajaja, ya lo sabía, ¡pronto serás el señor de Palafox!

Jajaja, ¿parezco mujer ahora?

-Eres mio, pero bueno, me arreglaré para ir a comer, ¿te veo a las 2 pm?

Mmmmm, ok, nos quedamos de ver en Puebla esquina Orizaba, el el café de doña Tere, tiene buena carta y da hasta café con postre, vale 75 pesos.

-Ok, me late, me cambiaré, bajo al Oxxo por la comida de Rodo y me voy para allá.

Perfecto princesa, por cierto, te tengo una sorpresa…

-¡¿Ahhh sí?!, ¡dime, dime!

Mmmm, el fin de semana juega Chivas, bueno eso es todo lo que te puedo decir…

-¡Aaaaahhhhhhhh sí, sí, sí!, ok, me apuro, te veo a las 2.

Te amo, cuídate.

El sismo de la CDMX, Morelos y Puebla sacudió no solo las conciencias de los mexicanos, si no las almas. Redacción.

El previo

13:10, el ambiente estaba grueso por el pleito en pareja (piso 5)

Esther y Miguel Ángel discutían porque su matrimonio ya no estaba funcionando. Desde hace 4 meses su vida era un infierno. Pleitos, peleas en la calle, frente a Toño, su hijo quien cursa el 3ro de primaria quien siempre quedaba pasmado ante las discusiones de sus padres. Ese día, Toño estaba en la escuela esperando a su mama, llevaba 10 minutos esperando.

Mientras tanto, Esther, gritoneaba por todo el departamento antes de salir por su hijo. Su vecina, Carolina, una anciana pensionada por el gobierno de la CDMX escuchaba el “grato” encuentro desde el pasillo donde tenía 3 macetas. Esa tarde salió a regarles un poco de agua y a dejar sobre el pórtico su basura.

Por su parte, Miguel Ángel, tomó su celular para hablar con el licenciado que le estaba llevando el caso de divorcio y el de la potestad de Toño. Esther salió muy molesta y azotó la puerta de su departamento.

Romina y Claudio

Romina y Claudio era una pareja joven. Estaban a punto de casarse el próximo 25 de Diciembre en la ciudad de Querétaro. Romina estaba desempleada y actualmente estaba viviendo sola en un departamento de la colonia Roma. Estaba dándose algunos meses de “break” antes de buscar empleo. Anteriormente estaba trabajando en un centro de atención a clientes Telcel.

Romina, tez blanca, carita bien formada, complexión delgada, nariz puntiaguda pero con cierto toque de ángel, chapitas naturales, siempre vestía fresca, animosa, cabello castaño claro, aproximadamente medía 1.80 m de estatura.

Claudio, trabaja en una empresa aseguradora, le habían dado un ascenso hace 15 días por su buen desempeño vendiendo seguros. Ahora era jefe de departamento y con ello cumpliría las expectativas de casarse en la ciudad de Querétaro donde viven sus abuelos. Romina y Claudio se conocieron en un Starbucks cuando coincidieron en su horario de comida.

A las 13:10, Romina bajaba por las escaleras y escuchaba como en el departamento de Esther gritaban, era el clásico pleito de pareja. Antes de enamorarse de Claudio, Romina siempre rechazaba al matrimonio porque creía que ese es el clásico destino de todas las mujeres con sus parejas. Observa como sale Esther de su depa y se espanta, baja la velocidad para evitar el enfado de su vecina quien vuela hacia la calle por las escaleras.

Al pasar por el pasillo en forma de U, saluda a Carolina quien eleva una plegaria al cielo en pro de Esther.

El sismo de la CDMX, Morelos y Puebla sacudió no solo las conciencias de los mexicanos, si no las almas. Redacción.

13:11, la pequeña conversación de muerte

Carolina: Mijita, ¡qué linda te vez!, ¿a dónde vas?

Romina: ¡Hola doña Caro!, voy al Oxxo por el alimento de Rodo, y usted cómo está?

Carolina: Lo bueno es que estamos mijita, ¡ay ese Rodo!, por cierto, ¿ya visitaste la nueva tienda de mascotas que está a 3 cuadras de aquí?, seguramente ahí venden alimento de todo tipo para el pequeño.

Romina: No, pero ya me dijo doña Tencha que esta muy buena, quizá vaya mañana con Claudio, es que quedé de ir a comer con él y no me dará tiempo de llegar, ya sabe como somos las mujeres.

Carolina: Tienes razón, recuerdo cuando también salía con el viejo Carlos, ahorita solo se la pasa durmiendo, pero no importa, somos felices viendo TV.

Romina: ¡Ay doña Caro!, usted siempre tan linda. (revisa sus bolsos), mmm por cierto ¡qué bueno que me quedé platicando con usted!, recuerdo que me bajé rápido que no tomé la tarjeta para pagar, luego Rodo se queda sin comer, tendré que regresarme.

Carolina: ¿Cómo?, pues qué suerte de que te hayas acordado, a mi se me olvidan las cosas muy rápido, 77 años no se dicen fácil.

Romina se despide de Doña Caro quien deja un frasco de agua al lado de una de sus macetas y cierra la puerta. Mientras tanto, Romina regresa a su puerta sin antes toparse con Miguel Ángel quien había visto esa escena desde su puerta y se preparaba a bajar para regresarse a su trabajo.

Te puede interesar: El clásico después de los clásicos

El sismo

Esther salía del edificio y estaba abriendo su coche cuando un auto que estaba frente a ella no le daba el paso, prácticamente estaba encerrada, eran las 13:13 horas y Toño seguía esperando en la escuela. Atrás de ella venía bajando Miguel Ángel con el celular en la mano, molesto y apurado.

Al salir, ve a Esther peleando con el chofer que no le dejaba salir mientras ella estaba arriba de su auto, la ignora cuando de pronto se empezó a mover la tierra…

Los gritos eran unísonos y la mirada atónita de los peatones se concentraba en el centro de la calle, los edificios se estaban moviendo como hojas de papel con el viento. Miguel Ángel en un movimiento fugaz logró sacar a Esther del auto y esta sin respingar salió y tomaron rumbo hacia el centro de la calle. Eran aproximadamente 1 minuto que se convirtió en un siglo de terror.

En ese momento, algo atrás de ellos se estaba desplomando, era el edificio donde ellos vivieron. Nadie salió en ese momento mas que ellos dos. Se salvaron.

Entre gritos y una extensa nube de polvazón, el llanto, el miedo y el dolor no cesaban. La vida les cambiaría para siempre.

Los Expulsados
Somos un equipo de profesionales que debate, escribe y argumenta los hechos futbolísticos de México y el mundo. También somos ácidos, a muchos les encantamos, a otros los molestamos; leernos es bajo tu propio riesgo.
Banner

Somos un equipo de profesionales que debate, escribe y argumenta los hechos futbolísticos de México y el mundo. También somos ácidos, a muchos les encantamos, a otros los molestamos; leernos es bajo tu propio riesgo.

Comentarios

Deja un comentario

Your email address will not be published.

*

Novedades de Mas allá de la patada

Ir Arriba